Comúnmente tenemos la idea que podemos hacer las cosas siempre de la
misma manera y que no existen otras formas de hacer lo mismo. La
verdad es que, si exploramos las posibilidades, existen muchas otras
convenciones e instrumentos para re – crear o transformar la forma como
elaboramos las cosas. Este es el caso del proceso enseñanza –
aprendizaje.
Aprender a desaprender es dejar de hacer
lo mismo de la misma manera. Es decir, encontrar o descubrir que sí
existen otros caminos que permiten llegar al mismo lugar, dejando las
limitaciones que comúnmente tenemos, por otras que no hemos
experimentado.
Aprendemos automáticamente desde el
momento de nacer. Aprendemos automáticamente a respirar, a comer y a
tener movimientos que permiten sobre vivir. Nuestro corazón late sin
ninguna instrucción. Nuestros pulmones aspiran y expiran oxígeno. De
allí en adelante, todo en la vida es un constante aprendizaje en donde
voluntaria o involuntariamente, el ambiente y el entorno nos motiva a
adoptar nuevas ideas, nuevas actitudes, nuevas habilidades que
posteriormente se convierten en formas de pensar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario